Para mantener la piel del rostro sana, no basta con aplicarse crema hidratante cuando sintamos que la piel está seca… Y tampoco es suficiente con someterse a tratamientos faciales cuando ya vemos que no hay solución.
Sé constante con el cuidado de la piel
De nada sirve cuidar nuestra piel únicamente cuando vemos que su aspecto no es bueno. En el cuidado de la piel, la prevención es clave y la constancia aún más.
Conoce qué tipo de piel tienes
No todas las pieles son iguales y por ello existen tantos tipos de productos para su cuidado. Es esencial conocer nuestra piel para escoger a nuestros aliados perfectos.
Límpiate la cara dos veces al día
Limpiar la piel del rostro es esencial para que todos los otros cuidados den sus frutos. Como mínimo, lávate la cara dos veces al día: uno por la mañana para eliminar las toxinas que se desprenden al dormir y otro por la noche para potenciar la función reparadora del sueño.
Escoge tu crema hidratante con ayuda de un especialista
La crema hidratante como cerave o utilizar un bloqueador solar es un must. La dermis está compuesta por un 70% de agua y la epidermis por un 15%. La hidratación es esencial y, por ello, déjate aconsejar por un especialista a la hora de hacer tu elección.
Aplícate crema hidratante dos veces al día
Es común pensar que la crema hidratante solo debe aplicarse antes de acostarse, pero también debe hacerse por la mañana. Es recomendable que la crema de día sea diferente a la de noche ya que, como hemos visto en el punto anterior, el funcionamiento de la piel es distinto.
Desmaquíllate bien, pero de manera suave cuidando la piel
Es algo evidente, pero que repetiremos hasta la saciedad. Llegada la noche, desmaquíllate bien la piel para que la regeneración de la piel al dormirsea efectiva. Por supuesto, desmaquillarse bien no es sinónimo de hacerlo de forma agresiva.
Cuida de manera especial el contorno de los ojos
La piel que rodea los ojos es especialmente fina, sensible y tiende aún más a la deshidratación. Hidrata esta zona tanto como puedas.
Exfolia tu piel
Por norma general, deberíamos exfoliar la piel dos veces por semana. Sin embargo, la frecuencia cambiará según tu tipo de piel: las pieles grasas necesitan más exfoliación que las secas.
Protégete del sol tu piel
Ahora que llega el verano, este punto cobra especial importancia. Aunque solo sea para ir al trabajo, aplícate crema solar y asegúrate de que esta crema es el último producto que aplicas en tu rutina.
Realízate tratamientos estéticos para potenciar los cuidados de tu rutina
Los tratamientos estéticos te ayudarán a mantener tu piel limpia y perfecta.
Mascarillas
Si tienes la piel grasa, una mascarilla sencilla de hacer y muy efectiva es la siguiente: 3 cucharadas de yogur natural, 2 de avena y 2 cucharadas de ralladura de naranja.
Mezcla bien todos los ingredientes, coloca la pasta sobre el rostro y espera 15 minutos antes de retirarla. Dirás adiós a los brillos y el exceso de grasa.
Piel seca
Machaca un plátano y añádele 4 cucharadas de avena y una de miel. Aplica la mascarilla en el rostro y deja actuar unos 15 minutos.
Después retira y aclara con abundante agua. Otra opción para pieles secas es triturar la pulpa de un plátano y un aguacate, mézclalas con un poco de miel y de crema hidratante suave, aplica en el rostro y retira a los 20 minutos.
Para el acné
Prepara una infusión de manzanilla, coge el tallo de una planta de aloe vera y sácale el líquido para añadirlo a la manzanilla.
Después, añade un puñado de cilantro, tritura la mezcla y coloca la masa en el rostro durante 15 minutos. Después, retira con agua templada.