Disautonomía es un término general para un grupo de trastornos que comparten un problema común: un sistema nervioso autónomo (SNA) que no funciona como debería.
Si padeces síntomas de artritis reumatoide, sería buena idea consultar precio de diclofenaco en internet. Podrías sorprenderte.
¿De qué se encarga el SNA?
El SNA es la parte del sistema nervioso que controla las funciones corporales involuntarias (funciones que no se controlan conscientemente), como el ritmo cardíaco, la presión arterial, la respiración, la digestión, la temperatura corporal y de la piel, la función hormonal, la función de la vejiga, la función sexual y muchas otras funciones.
Cuando el SNA no funciona como debería, puede causar problemas cardíacos y de presión arterial, problemas respiratorios, pérdida de control de la vejiga y muchos otros problemas.
¿Cuál es la frecuencia de la disautonomía en todo el mundo?
La disautonomía, también llamada disfunción autonómica o neuropatía autonómica, es relativamente frecuente. En todo el mundo afecta a más de 70 millones de personas. Puede estar presente al nacer o aparecer gradual o repentinamente a cualquier edad. Esta enfermedad puede ser de leve a grave, e incluso mortal (raramente). Afecta por igual a mujeres y hombres.
¿Cómo aparece la disautonomía?
La disautonomía puede aparecer como un trastorno propio, sin la presencia de otras enfermedades. Esto se denomina dis. en etapa primaria. También puede producirse como condición de otra enfermedad. Esto se denomina dis. en etapa secundaria.
Síntomas y causas
Se produce cuando los nervios del SNA no se comunican como deberían. Cuando su SNA no envía mensajes o recibe mensajes como debería o el mensaje no es claro, usted experimenta una variedad de síntomas y condiciones médicas.
La disautonomía puede afectar a las funciones del SNA
Los síntomas pueden estar presentes una parte del tiempo, desaparecer y volver en cualquier momento.
- Algunos síntomas pueden aparecer en un momento de estrés físico o emocional o pueden aparecer cuando se está perfectamente tranquilo.
- Algunos síntomas pueden ser leves en algunos pacientes; en otros, pueden interferir constantemente en la vida diaria.
Diagnóstico y pruebas
Una de las pruebas que su médico utilizará para diagnosticar algunas formas de disautonomía es la prueba de la mesa basculante.
Otras pruebas que su proveedor de atención médica puede utilizar para ayudar en el diagnóstico son las pruebas de sudoración, las pruebas de respiración, las pruebas de laboratorio (análisis de sangre) y el estudio del corazón (electrocardiografía). Se pueden realizar otras pruebas para determinar si otras enfermedades o condiciones están causando la disautonomía.
Gestión y tratamiento de la disautonomía
No hay cura para esta enfermedad, pero se pueden controlar los síntomas. Su proveedor de atención médica puede sugerir muchas terapias diferentes para controlar sus síntomas particulares de disautonomía.
Prevención
La disautonomía no se puede prevenir. Puede tomar medidas para controlar sus síntomas y evitar que empeoren. Recuerde que su salud es lo más importante para nosotros.
Perspectiva / Pronóstico en la disautonomía
Nadie puede saber con seguridad cómo será su vida viviendo con disautonomía. Los síntomas varían de una persona a otra. La gravedad de la enfermedad varía de una persona a otra: de leve y manejable a grave e incapacitante.
El curso de la enfermedad también cambia: en algunas personas, los síntomas están siempre presentes; en otras, los síntomas aparecen durante semanas, meses o años, desaparecen y vuelven a aparecer. En otras palabras, la disautonomía es imprevisible.
A continuación: Conoce como funciona el enalapril
